Concebido en 2015 por el Sr. André Redine de Avellar, curador del CDMVE quien introdujo equipos como el “Pluviógrafo de Fortuna” que produce una lluvia artificial en un modelo geográfico en áreas de riesgo. De esta forma, con el milímetro deseado, es posible analizar la corrosión y disolución del suelo.
Ideal para que los niños comprendan el peso del agua de lluvia en estas regiones y aprendan sobre la importancia de monitorear los elementos atmosféricos, y qué trámites se deben realizar en caso de desastres.
La lluvia artificial en la sede del CDMVE forma parte del sistema de investigación meteorológica, junto con estaciones automáticas y pluviógrafos, y aplicaciones disponibles para toda la población, con divisiones regionales, en sistemas Android e IOS.